domingo, 8 de noviembre de 2015

BARRANCO LA VIRGEN

El barranco de la Virgen se sitúa al oeste de Valleseco y aún conserva fragmentos relícticos de lo que fuera el antiguo bosque de lauráceas de Gran Canaria, aquella Selva de Doramas a la que cantó Bartolomé Cairasco de Figueroa.

El otoño en Gran Canaria es una estación invisible, sin embargo cuando visitamos lugares tan remotos como el Barranco de Crespo o el Barranco de La Virgen, y en general la zona de alta de Valleseco, descubriremos el amplio cromatismo de los árboles caducifolios, acercándonos a una sinfonía de colores que nos indica la llegada del otoño. Castaños, nogales, álamos, robles, plátanos, adornan nuestro otoño y aunque no son árboles autóctonos su carácter caducifolio es un auténtico espectáculo en rutas como ésta.